¿Suena tonto? Puede ser. Pero nuevamente, ¿no es más tonto confiar la salvación a una compilación de Evangelios y cartas de origen y autor desconocido?
El seminario de Jesús es tal vez uno de los intentos más objetivos y sinceros de un concejo ecuménico de eruditos cristianos para determinar la autenticidad de los actos y dichos de Jesús. Sin embargo, su metodología incluye ¡votos de castidad!
Dos mil años después del ministerio de Jesús, cerca de doscientos eruditos están formulando una opinión cristiana colectiva acerca de la confiabilidad de las citas e informes históricos de Jesús por los colores de las cuentas. Por ejemplo, con respecto a las palabras de Jesús, las definiciones de los colores de las cuentas son:
Rojo—Jesús lo dijo o algo bastante parecido.
Rosa—Jesús probablemente dijo algo parecido a eso, aunque sus palabras han sufrido algún cambio en la transmisión.
Gris—estas no son sus palabras, pero las ideas son parecidas a las suyas.
Negro—Jesús no lo dijo, las palabras representan a la comunidad cristiana o a un punto de vista más tardío.[1]