Como puede verse, la versión de Marcos presenta a Jesús siendo impotente ante el hecho de la incredulidad, y no pudo hacer ningún milagro. Mateo cambia la versión de Marcos para eliminar este problema.
Marcos: “No pudo hacer allí ningún milagro…”.
Mateo: “No hizo allí muchos milagros…”.
Los eruditos han sugerido que Mateo quería evitar la descripción de Jesús como un carpintero y, por lo tanto, la cambió (por “hijo del carpintero”, implicando que su “padre” y no él era carpintero) debido a la generalizada actitud negativa hacia el trabajo manual, que era característica entre la élite del mundo grecorromano.